Fiesta de la Sagrada Familia
Fiesta de la Sagrada Familia
R. Señor,
dichosos los que viven en tu casa.
Dichosos los que viven en tu casa,
te alabarán para siempre;
dichosos los que encuentran en ti su fuerza
y la esperanza de su corazón.
R. Señor, dichosos los que viven en tu casa. Salmo 83
Dichosos los que viven en tu casa,
te alabarán para siempre;
dichosos los que encuentran en ti su fuerza
y la esperanza de su corazón.
R. Señor, dichosos los que viven en tu casa. Salmo 83
El Evangelio de hoy, según san Juan, oímos la historia
de cuando Jesús, de niño, se perdió en Jerusalén durante las festividades de la
Pascua. En la tradición judía, un niño de
trece años se puede coincidir un hombre. Jesús estaba en la cúspide de la virilidad,
pero no todavía hombre adulto. María y José se preocuparon mucho en no
encontrar Jesús con sus parientes o otros durante el viaje a casa. Volvieron a Jerusalén
a buscarlo y al tercer día, lo encontraron en el templo hablando y haciéndoles preguntas
a los doctores. Al preguntarle porque se ha portado así, Jesús les contestó que
se trata de los asuntos de su padre.
Si tu hijo o hija se
perdiera por tres días, ¿Cómo te sintieras? ¿Cómo crees que María o José se sentió?
Si Jesús hubiera sido tu hijo, ¿Cómo lo hubieras tratado? Cómo padre o madre, ¿Cuáles
son tus deseos más sinceros para tus hijos?
https://www.lds.org/friend/2000/10/the-boy-jesus?lang=eng
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