V Domingo Ordinario
Alabemos
al Señor, nuestro Dios.
Él puede contar el número de estrellas
y llama a cada una por su nombre.
Grande es nuestro Dios, todos lo puede;
su sabiduría no tiene límites.
Alabemos al Señor, nuestro Dios. Salmo 146
Santo
Evangelio: Mc 1, 29-39
Frases Claves: “Todos
te andan buscando”. Él les dijo: “Vamos a los pueblos cercanos para predicar
también allá el Evangelio, pues para eso he venido”.
El evangelio tiene tres
partes: Jesús cura a la suegra de Simón, al atardecer le traen a Jesús, los
enfermos y los quienes tiene demonios, y a la madrugada del siguiente día antes
de que saliera el sol totalmente, Jesús se levanta y busca un lugar solo para
orar.
La suegra de Simón al ser
sanada se levantó y les sirvió. ¿Por qué se levanta a servir?
Más tarde, la gente del pueblo trae a los enfermos y a los poseídos. ¿Por qué?
A la madrugada, Jesús se levanta y busca un lugar solo para orar. ¿Por qué?
Refleja un poco sobre cada una de las secciónes ; cómo se enlacen y lo que Dios está tratando de transmitirte en cada sección.
Al fin, Jesús explica su propósito.
¿Cuál es tu propósito?
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